Las plantas de cogeneración utilizan motores de combustion o turbinas para transformar combustibles como el biogás en calor y energía eléctrica. El calor generado puede ser usado como calefacción residencial o en procesos industriales. Con la ayuda de un generador se produce energía eléctrica que se puede consumir localmente o que puede alimentar la red pública. En comparación con muchas otras centrales eléctricas, en las plantas de cogeneración el calor tiene un uso específico y no es solo un producto residual.

Los motores de combustión se usan en todas partes

Los motores de combustión con una potencia eléctrica nominal entre 50 kW y 1 MW tienen una amplia gama de aplicaciones: en grandes edificios como escuelas y hospitales, en redes de calefacción urbana, en una gran variedad de actividades industriales y comerciales, en piscinas, etc. Esta tecnología disfruta de numerosas ventajas. como una amplia infraestructura existente para biogás y gas natural, un grado elevado de utilización conjunta de la energía primaria y una tecnología avanzada que cuenta con muchos años de experiencia.

Los nuevos retos de una tecnología avanzada

Aunque desde hace tiempo conocemos y hemos avanzado mucho en la tecnología subyacente, los fabricantes siguen enfrentándose a nuevos retos. El acoplamiento a la red eléctrica requiere de la conformidad con las normativas, en constante cambio, de los operadores de la red. En particular, el aumento de los requisitos de funcionamiento entraña riesgos y requiere un replanteamiento de conceptos que hasta ahora se consideraban probados y comprobados. Los cambios repentinos en la carga debido a los cortocircuitos en la red eléctrica pueden generar pares mecánicos demasiado elevadas y provocar estrés en el tren motriz. La sobrecarga de componentes como, por ejemplo, los acoplamientos mecánicos, puede suponer un peligro para la seguridad del sistema. El uso de volantes inerciales adicionales puede aumentar la estabilidad del ángulo del rotor del generador durante y después de los cortocircuitos en la red, ya que se dispone de más almacenamiento cinético. Se plantea así para los fabricantes de motores de combustión interna la cuestión de cuáles de estas medidas son necesarias para cada caso específico. Con la ayuda de modelos de simulación plantas de generación se pueden tratar muchas de estas cuestiones.